Volver con el exnovio puede traer efectos psicológicos negativos en nuestras vidas.
A lo largo de nuestra vida es común tener recuerdos maravillosos, siendo así, que en ocasiones nos sentimos identificados con la frase “todo tiempo pasado fue mejor”. De igual manera, en nuestras relaciones sentimentales esto parece ser un karma, y mientras más nos alejamos de ese “ex”, su ausencia es más difícil.
El término “cangrejear” define muy bien estas situaciones, referenciando el hecho de caminar hacia atrás, pero en la vida real se convierte en un proceso inconsciente de querer recobrar esos momentos a solas con la expareja, reviviendo esos buenos ‘polvos’ o instantes juntos que nunca se pudieron salieron de nuestra memoria.
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Es muy cierto que hay parejas inolvidables, y como seres humanos siempre queremos volver a ese lugar o persona donde fuimos felices, aún más, en aquellos momentos de aburrimiento o soledad, cuando lo único que retumba en nuestras cabezas son viejos recuerdos que nos transportan a un instante especial y romántico con esa pareja a la que le dimos todo, pero por cuestiones de la vida ya no está con nos otros.
Estos recuerdos por lo general nos hacen olvidar aquellos defectos o situaciones dolorosas que vivimos en el pasado, además, el hecho de ser algo ‘prohibido’ se vuelve más atractivo para muchas personas que solo quieren vivir una aventura y no meterle corazón.
Según un estudio de la Universidad de California, alrededor del 71% de las personas retoman una relación, por el simple hecho de no sentirse solas.
Aunque parezca que volvemos a tocar el cielo, puede resultar perjudicial para nuestras vidas, dado que, empezar o tener una relación sin haber cerrado un ciclo puede ser un signo de inmadurez emocional, pues, en nuestros corazones aún tenemos emociones hacia esa persona que creímos olvidas con el paso de los días.
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La psicóloga, Daniela Fonseca habló con La Mega y comentó, “uno de los principales problemas en las relaciones con los exnovios, es que no en todas las situaciones se completa el proceso de duelo, encontrarse con el ex hace que no se cierre ese proceso de duelo y que no se logre sanar este momento de nuestras vidas”.
Esto también convierte a la persona que cangrejea en un ser solitario, pues inconscientemente le da pereza volver a conocer a alguien nuevo y simplemente se quieren quedar en una zona de confort, lo más perjudicial es que alguno de los dos puede volverse a enamorar y querer regresar convirtiéndose en una carga sentimental.
Fonseca comentó, que esto es perjudicial para nuestros sentimientos, puesto que “voy a depender de que la otra persona regule mis emociones o voy a empezar a crear un vínculo toxico porque no estoy comprometida al 100% pero aun así mantengo un compromiso”.
Además, la psicóloga comentó, que puede que nuestra mente nos juegue una mala pasada, “se pueden presentar alteraciones en los auto esquemas de cada persona, de ¿Por qué esa pareja no está conmigo? ¿Sera que no soy suficiente para ella?, empieza a cuestionarme cosas de forma excesiva y voy a tener muchas personas sin tener respuestas”
De esta manera, puede que una segunda oportunidad sea algo increíble y funcione, pero solo en algunos casos, como cuando los dos se encuentran solos y tienen intenciones de recuperar algo que aún no se ha perdido.