Rhaenys Targaryen y el momento culminante del episodio 2x04 de ‘La Casa del Dragón’.
Desde este mismo 8 de julio ya tenemos con todos nosotros el cuarto episodio de 'La Casa del Dragón', la precuela de 'Juego de Tronos' basada en los libros 'Fuego y Sangre' de George R.R. Martin. Este episodio marca la mitad de la segunda temporada y, como era de esperar, ha presentado escenas memorables, especialmente una protagonizada por Rhaenys Targaryen, "la reina que nunca fue".
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A partir de ahora, advertimos de spoilers del cuarto episodio de la segunda temporada. Si aún no lo has visto, te recomendamos hacerlo antes de seguir leyendo. En una entrevista para Variety, Eve Best, quien interpreta a la princesa Rhaenys Targaryen, compartió su experiencia al enfrentar una de las escenas más desafiantes y significativas de la serie.
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En el episodio, la proposición de paz con Alicent fracasa y, después de un agravio por parte de su hijo Jace, Rhaenyra decide finalmente tomar armas contra los verdes. A lomos de su dragona Meleys, se ofrece a atacar al ejército de Cole para debilitarlo y tomar ventaja en Westeros. Sin embargo, la escena culmina en un desenlace fatal para ambos, montura y jinete, quienes no obstante ofrecen una lucha digna.
Best describe esta escena como una experiencia fuera de su zona de confort. La actriz confesó sentirse "muy mal equipada para lidiar con todo esto". La secuencia requería un complicado movimiento mientras varios asistentes usaban enormes sopladores de hojas para simular el viento, lo que hacía casi imposible escuchar las instrucciones del director, que llegaban distorsionadas a través de un micrófono. "Estás pensando, 'Tengo este momento realmente intenso para Rhaenys, y tengo que concentrarme', pero te estás aferrando a la vida en algunos casos", relató Best.
Uno de los momentos más intensos de la escena fue cuando los dragones giraron en espiral, haciendo que Rhaenys realizara un giro de 360 grados con Vhagar, quedando boca abajo durante un buen rato. "En tiempo en pantalla, creo que fue un momento minúsculo, pero en tiempo real, fue toda una tarde conseguir que esta máquina hiciera un giro de 180 grados", comentó Best.
Además, recordó una situación cómica: "Hubo un retraso, así que me quedé colgando del asiento mientras todos se levantaban para tomar un café. '¡Déjenme bajar! ¡Alguien déjenme bajar! ¡No se olviden de mí!'", relató entre risas.
El desgaste físico no fue todo. Best también tuvo que transmitir el estado emocional de Rhaenys a lo largo de esta intensa secuencia. Para ello, conversó en profundidad con el director del episodio, Alan Taylor, sobre la carga emocional de su personaje. Rhaenys se embarca en una misión suicida al iniciar un conflicto que ha intentado evitar a toda costa.
La actriz destacó la importancia de la responsabilidad moral y espiritual de su personaje. A pesar de las presiones externas, Rhaenys siempre ha tenido en mente el panorama general, resistiendo la tentación de usar a los dragones en la guerra. "Para ella, decir 'Seré yo quien haga esto', es muy valiente porque sabe que no hay forma de sobrevivir a eso. La elección de regresar y lanzarse con Vhagar, eso es una misión kamikaze absoluta. Para mí, ahí fue cuando lo sentí como algo muy de samurái. Fue ese último acto del noble guerrero", explicó Best.
Esta escena no solo destaca por su complejidad técnica, sino también por la profundidad emocional que Best logró transmitir. La combinación de desafíos físicos y emocionales hizo que este momento fuera uno de los más impactantes de la temporada, consolidando a Rhaenys Targaryen como uno de los personajes más fascinantes de 'La Casa del Dragón'.