Bruce Willis se vio obligado a abandonar el mundo de la actuación por consecuencias de la enfermedad.
Tras anunciarse que el famoso actor de Hollywood, Bruce Willis dejará las pantallas del séptimo arte a los 67 años, por culpa de una grave enfermedad que afecta su sistema cognitivo; se trata de la afasia, una afectación cerebral que influye directamente en el lenguaje.
“Nuestro amado Bruce ha estado experimentando algunos problemas de salud y recientemente le diagnosticaron afasia, Bruce se está alejando de la carrera que ha significado tanto para él”, expresó la familia del actor.
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Este trastorno afecta el habla, la escritura y la lectura. Además, es común en adultos mayores que han presentado un accidente cerebro vascular.
El diagnóstico de esta enfermedad debe ser realizado por un médico luego de imágenes diagnosticas como una tomografía computarizada o una resonancia magnética
Aunque existen diferentes causas un ACV (Accidente Cerebro Vascular) es la más común, sin embrago, la afasia puede desarrollarse por una infección cerebral, un tumor o degeneración neurológica.
Existen variedades de este trastorno, pero las cuatro principales son:
Expresiva: el paciente entiende y sabe lo que quiere decir, pero se le dificulta hablarlo o escribirlo.
Anómica: presenta dificultad para usar las palabras adecuadas al momento de describir objetos o lugares.
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Receptiva: puede leer, pero el paciente no encuentra sentido a las palabras que lee o escucha.
Global: este tipo de afasia le impide al paciente hablar y entender lo que lee, escribe o escucha.
Los pacientes con afasia tendrán dificultades para interpretar bromas o sarcasmo, incluso para detectar imágenes sin sentido o absurdas. Así mismo, tendrá problemas para iniciar una conversación o incluso mantener un diálogo coherente.
La mayoría de los pacientes necesitan de una terapia del lenguaje lo antes posible, para tratar de contrarrestar los efectos de este trastorno.
Así mismo es recomendable asistir a un tratamiento de rehabilitación integral, así lograr tener en constante control no solo los aspectos ligados al lenguaje sino a la motricidad, distímicos y afectivos.