Se dice que el lugar donde fue construido el Hotel Cecil estaba "maldito".
Construido para los años 20 en el centro de Los Ángeles, el Hotel Cecil fue una idea que hizo posible el famoso arquitecto William Amontona Hanner, un lugar en el que el experto acomodó 700 habitaciones en 19 pisos para dar tranquilidad, felicidad y confortable descanso para los huéspedes.
La idea inicial del Hotel Cecil era construir un hogar acogedor para los hombres de negocios con un lobby lujoso, pero con el pasar del tiempo la reputación del lugar se fue deteriorando, no solo por los otros hermosos hoteles que habían alrededor y por los que las directivas tomaron la decisión de replantear las tarifas para sus huéspedes, sino porque al lugar empezaron a llegar personas con distintos problemas y "malas energías".
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Al cabo de unos meses, el Hotel Cecil empezó a ser llamado un "hotel embrujado", pues allí vivía un ocultista que se hacía llamar 'la bestia 666', quien frecuentemente realizaba rituales, magia negra, etc., lo que claramente empezó a "cargar" con dichas energías el sitio.
Ya en 1931 fue cuando sucedió el primer suceso aterrador en el Cecil, pues un hombre que había sido buscando durante mucho tiempo por la policía resultó muerto en una de las habitaciones del Hotel. Posteriormente, en 1937 una mujer cayó desde el noveno piso del hostal, sin embargo, nunca se confirmó si había sido un suicidio u homicidio, pues las pistas no llevaron a nada.
Así como estas muertes empezaron a suceder una tras de otra, así como también el terrorífico caso de una mujer que arrojó a su bebé recién nacido por una ventana; el asesino serial y satanista que se escondió en el Hotel Cecil durante más de un año y la misteriosa desaparición de Elisa Lam, una joven que fue a pasar vacaciones en Los Ángeles y resultó muerta mientras huía de algo que las cámaras de seguridad no lograron captar.