Hombre apareció desnudo cerca a Guaduas y rogó ayuda: “las brujas me están matando”

¿Las brujas existen? Pues hay más de una persona que asegura haberlas visto merodeando en diferentes municipios de Colombia.

Por: María Camila Torres Cepeda
@kamitorrs

En diferentes municipios de Colombia se han escuchado esas historias de terror relacionadas con supuestas brujas que aparecen en las noches en forma de mujer y luego se convierten en animales y asechan a incautos que están solos en lugares boscosos.

Wilson, un oyente que llamó al Cartel Paranormal de La Mega, contó un testimonio que lo puede dejar aterrorizado si usted es uno de los que cree en estas historias de brujas, y si no cree, igual le puede interesar para que, por si acaso, sea precavido.

En Guaduas (Cundinamarca), hace varios años, en una vereda ubicada entre este municipio y Villeta, en la Loma de la Cruz, sus habitantes se acostumbraron a ver a altas horas de la noche y madrugada unos animales extraños que volaban sobre árboles altos y generaban pavor, a tal punto que muchos intentaban no cruzar por este lugar, pues a voces en el pueblo se decía que eran brujas...

Sin embargo, un hombre que le gustaba mucho beber trago y era osado para algunos, que veían cómo desafiaba a esos animales e insultaba a las supuestas brujas que sobrevolaban dicho lugar, eso sí, se sentía con toda la valentía porque cargaba un machete y en su bolsillo una bolsa de sal que había mandado a bendecir (contaban los abuelos que la sal espanta a las brujas).

“Cuando él pasaba con la sal trataba mal a esos animales y decía que eran brujas y quería saber cuáles eran las vecinas”, señaló en su relato.

En una de las borracheras que se pegó este hombre desapareció y su esposa no supo más de él, hasta que a los 15 días regresó a la casa el caballo, en el que se movilizaba la última vez que lo vieron, pero sin su dueño.

“La mujer llegó a la casa donde estábamos y le contó a un primo que el caballo llegó y que la última vez que habían visto a su esposo era en la cantina. Nos fuimos con mi primo (a buscarlo), yo tenía 10 años y entramos a una maraña y empezamos a llamarlo y le gritábamos por su nombre”, contó.

Cuando llegaron a un árbol gigante, según Wilson, encontraron al pobre hombre amarrado con bejucos “y estaba solo en calzoncillos y con la cabeza agachada y cuando nos vio, empezó a llorar, dijo que lo ayudáramos que las brujas lo estaban matando”.

El oyente relató que el hombre tenía en el cuerpo señales de maltrato físico y laceraciones propinadas aparentemente con un fuete. “Él dice que se acuerda que llegó a ese lugar donde trataba mal a las brujas y que se lo habían llevado por no llevar el machete que era su protección”.

Fuente: Sistema Integrado Digital

Publicado: 2022-01-12