El viejo motel era la única opción para los habitantes del lugar y atemorizaba a sus huéspedes hasta desaparecerlos.
Un viejo motel conocido como "El descanso del viajero" quedaba a las afueras de la ciudad y aunque tenía una apariencia desgastada, esta era la única opción para los turistas que pasaban por la zona.
En torno al motel surgían diferentes historias, se decía que el lugar estaba embrujado y que cada tanto ocurrían extraños sucesos en las habitaciones.
Una noche, un grupo de jóvenes que viajaban explorando tierras lejanas, decidió quedarse en el motel al ver que ya estaba anocheciendo.
Una anciana con aspecto más bien sombrío, les asigno a los muchachos las habitaciones 13 y 14. Sin hacer mucho caso a los cuentos que habían escuchado se instalaron en las habitaciones.
Justo cuando el reloj marcó la media noche, se comenzaron a sentir ruidos extraños en el lugar, golpes en las paredes y gritos y risas escalofriantes. Aunque intentaron ignorar esos ruidos, no lograban dormir.
Cansados, decidieron reunirse en la habitación 13 para estar juntos y darse un poco de alivio entre ellos; de repente la puerta de la puerta de la habitación 14 se abrió lentamente y una sombra a la que no se le distinguía rostro apareció en el umbral.
Aterrorizados, corrieron a la recepción, sin embargo, la anciana que los había atendido ya no estaba. Al ver que no quedaba nadie más en el motel decidieron salir de allí.
A las afueras del lugar se encontraron con un hombre mayor que les contó la verdadera historia del motel.
Hace algunas décadas, un grupo de criminales había asesinado a las personas que se hospedaban en las habitaciones 13 y 14. Desde entonces los espíritus de las víctimas y sus asesinos vagaban por el lugar atormentando a quienes se alojaban en el motel.
Tiempo después el motel fue abandonado y ahora es más un recordatorio de las horribles cosas que pasaron dentro de sus habitaciones.
Los viajeros, ahora adultos. Decidieron regresar al lugar para buscar más respuestas y enfrentar sus miedos, además llegaron con la clara intención de ayudar a los espíritus que estaban en el recinto.
Encontraron la edificación mucho más deteriorada y desolada que cuando fueron por primera vez. Al cruzar el umbral de las habitaciones sintieron una presencia oscura y escalofríos por todo el cuerpo.
Los espíritus que buscaban comenzaron a manifestarse, esta vez los viajeros intentaron comunicarse con ellos, pero sus apariciones fueron agresivas, y aterrorizados decidieron buscar ayuda de un experto.
Así que un medium del lugar se ofreció a ayudarlos y contactar las almas de los asesinos y las víctimas, sin embargo, una fuerza oscura se apoderó del lugar y los espíritus de los asesinos se llevaron con ellos, condenándolos a vagar eternamente junto a ellos.
Después de esto, nadie más se atrevió a ingresar al "Descanso del viajero".