Previo a coronarse como la mujer más bella del mundo, Meza se destacó por sus calificaciones en ingeniería de software y por ser deportista.
Antes de coronarse como la mujer más inteligente y bella del mundo, la mexicana Andrea Meza llevaba una vida común y corriente como cualquier otra persona de su ciudad en Chihuahua, México.
Aunque convertirse en Miss Universo le cambió la vida y así lo ha registrado en sus redes sociales, basta con ir un poco más abajo en su cuenta de Instagram para notar cómo era su rutina antes de llagar al evento más importante el mundo de la belleza.
Desde sus cambios físicos, pasando por sus calificaciones en su carrera de ingeniería de software, su pasión por las matemáticas, hasta la llegar a dirigir un equipo de voleibol, son una perspectiva más amplia que ofrecen las publicaciones en su perfil, en donde registra publicaciones desde su adolescencia.
Aunque ahora la mujer de 26 años sobresale entre las otras por sus facciones delgadas y su estilizado cuerpo, seis años atrás su estilo iba acorde al de generación en aquel entonces.
Así mismo, la joven llegó a usar brackets que tuvo por un largo tiempo, mientras también se concentraba en sus estudios en la Universidad Autónoma de Chihuahua, en donde se destacó por sus excelentes calificaciones.
“Sí soy bien ñoña”, escribía en la descripción de sus publicaciones en 2013, mientras presumía sus perfectas calificaciones en su carrera de ingeniería.
Tras su graduación como ingeniera, Meza incursionó en los reinados para empezar como representante de Chihuahua, hasta pasar a ser la representante de México y finalmente convertirse en la nueva Miss Universo.
Su transformación fue sorprendente y aunque siempre se ha caracterizado por se una mujer bella, sin duda la llegada al modelaje, su disciplina con el ejercicio y su dedicación en su trayectoria, ahora la hacen la más bella e inteligente del mundo.
Desde el pasado domingo, Andrea se ha destacado en sus primeros días como reina por ser una mujer abanderada de los derechos de su género. Desde el día uno de su discurso dejó en claro que su batalla irá en contra de la violencia hacia la mujer y desde antes de llegar a la corona, se definió feminista, siempre en busca de la igualdad y en contra del acoso.